Obra
Capitan
Estado de México, México. 2015
Hace unos años pensé que sería fácil fotografiar caballos pero, por más que intenté, no me gustaba el resultado. Me di cuenta de que para hacer una toma digna de cada semental, primero debía conocerlo a la perfección: su mirada, movimientos, carácter... su ser. Capitán me enseñó que eso debe hacerse desde el corazón.