Obra
Hope
Oregon, EUA. 2015
En la vida hay acontecimientos difíciles que te van quemando y quemando, duelen, ¡y mucho! Pero todo ese sufrimiento, cicatrices y quemaduras, eventualmente se convierten en una flama muy poderosa, que dirigiéndola por el camino correcto, puede crear un fuego hermoso.
Pinta, toma fotos, aprende a tocar un instrumento, escribe, baila, diseña, esculpe, viaja, escala… ¡Aventúrate! ¡Crea!
Las quemaduras ya pasaron, ahora está en nosotros convertirlas en algo bello, darles un canal, una salida, transmutarlas. Ahora no lo puedes ver, pero quizá hasta termines agradecido con la vida por esas dolorosas pruebas.